
Es la luz vinculada con la fe que nos muestra el camino incierto que significa la vida. Propicia los nuevos conocimientos y la claridad mental.
La iluminación es una experiencia personal, que nos une a Dios y nos permite comprender que no estamos solos, que somos parte del universo y a la vez somos el universo.
La forma de esta runa por una parte es una línea vertical que nos recuerda la máxima contracción, haciendo contacto con el ser, para que a partir de este acto se pueda obtener la iluminación, la respuesta que nos hace instalarnos en el gozo y avanzar. Este paso lo representa la runa con las líneas diagonal y vertical mas pequeñas.
La luz del conocimiento esta en nosotros. Tenemos todas las respuestas. Oyendo a nuestro ser interno. Escuchando a nuestro corazón.

Es el antiguo símbolo de la estrella polar, que antes de la invención de las brújulas era utilizado por los viajeros para no perder el rumbo en sus travesías y que los celtas nos legaron como recordatorio de no perder la dirección en la travesía mas importante, la de nuestra vida o en vivir nuestra vida. Dar orientación o rumbo a nuestras vidas es un reto, constantemente confundimos lo urgente con lo importante. Corremos aunque no sabemos para que o a donde vamos. Nos mantenemos siempre ocupados para justificar que hacemos algo, aunque ese comportamiento nos haga improductivos, pues al no gratificarnos no estamos teniendo energía adicional. Y pretendemos ser perfectos lo que nos conduce a la intolerancia. Responder a estos mandatos impulsores es muy frecuente, estamos acondicionados culturalmente a hacerlo y con ello perdemos el rumbo.

Su forma simboliza al ser humano en el centro representado por la línea vertical. Las líneas diagonales son los inyectores que lo impulsarán en el desarrollo de su profesión.
Su forma simboliza los brotes, por lo que nos habla de crecimiento y de desarrollo.
La profesión es la actividad productiva que realizamos para el desarrollo de la sociedad, de la familia y de nosotros mismos. Por lo que debemos hacer que fluya en armonía con todos los integrantes de estos grupos, que cree vínculos firmes basados en la confianza, el amor y el respeto, que sean la base para un mundo mejor.

Si observamos sus trazos son expansivos y sus formas redondeadas por lo que es un símbolo femenino, intuitivo y nutricio.En esencia significa ver claro, eliminar un punto de vista parcial que implica juicios. Trabajar con ella permite ver la vida sin juicios, instalados en el amor, el respeto y la aceptación. Nos da la flexibilidad necesaria para fluir y crecer. Nos permite expandir nuestra creatividad y nuestros sueños ya que no habrá juicios que limiten nuestros anhelos.Nos ayuda a darnos cuenta que no somos poseedores absolutos de la verdad y que todas las verdades o puntos de vista forman la verdad absoluta, por lo que todos somos importantes.Esta runa además nos permite integrar todos los mundos, las diferentes realidades y planos. Nos saca del problema para encontrar la solución.

La imaginación es fundamental para el hombre. Ya que es el principio de cualquier obra pero vivir en la fantasía nos impide realizar. Con ésta runa se eliminan pesadillas y sueños irrealizables y se logra concretar lo que imaginamos.
La runa que nos centra, permitiendo que se manifieste la creatividad.
Si la observamos, como todas las runas es una figura equilibrada, en este caso muestra una figura humana que realza el equilibrio de pensamiento, señalado por la línea horizontal a la altura de la cabeza. El equilibrio emocional, señalado por la línea a la altura del corazón y el equilibrio de las acciones, señalado por la línea a la altura de los pies.
Acciones, pensamientos y emociones en armonía, nos protegen de evadirnos de la realidad y de responsabilizarnos de nuestro crecimiento personal, que implica riesgos, fracasos y victorias.

Es el transformador de almas. Su uso nos lleva a reconocer nuestra presencia dentro del universo, nuestra capacidad creadora, y transformadora de nosotros mismos y de nuestro entorno gracias a la voluntad. Usando el mago entenderemos el significado de las cosas que nos suceden, lo que nos llevará a aprender las lecciones y transformar el karma en Dharma. Nos sitúa en entender que la batalla es personal y que la vida es ahora y que hay que cesar de delegar nuestra felicidad o infelicidad a otros.